«A rabiar te quiero amar»
Dedicado a Mayte Sierra Amado
Dichoso mes de diciembre
que te trajo sin saber
que serías hoy la esencia
y el sentido de mi ser.
Entre el frío y la esperanza
tu fragancia sobre mi piel
y entre lágrimas te tuve
para resguardarte del ayer.
Sonrisa de abril y mayo,
mirada al atardecer,
mente siempre cavilando
y pecho de rica miel.
La vida te fue marcando
el rumbo de tu existir,
sabiendo que llegarías
a ser parte de mi vivir.
Tu madre como bandera
y la tolerancia dentro de ti.
Incomprendida y luchadora,
siempre fiel a tu sentir.
El destino quiso unirnos
y jamás separarme de ti,
caprichosa providencia
que tardía vino a por mí.
Nuestra vida fue danzando
al compás de un sentimiento,
una unión inseparable
entre una nota, un ritmo y un lamento.
Nuestros sueños se fundieron
una noche oscura y febril
y las almas se elevaron
buscando un mismo fin.
Siempre cómplice aliada
tu sonrisa me traspasa.
Nunca antes explorada
tu boca que me embauca.
Cada instante compartido
es un susurro en mis oídos,
cada lágrima en tu rostro
medicina para mis sentidos.
Hoy seguimos navegando
en el mar del desvarío,
donde solo los dos sabemos
cómo guiar nuestro navío.
Y mis musas van sellando
cada emoción, cada espacio,
cada vivencia y cada quejido.
Y tus gestos van llenando
cada página que escribo.
Brindo por lo vivido,
por cada día compartido,
por la pasión que me profesas
y por el afecto que te inspiro.
Y celebro haber brotado
entre el árbol de tu alma
para regar cada mañana
la historia de nuestra vida.
Ganador del II Certamen de Poesía de Cofrentes. 21 diciembre de
2016.
Gracias, gracias y gracias...
ResponderEliminarNo sé cómo dártelas...Me sigue pareciendo poco, pequeño para algo tan inmenso, tan grande sentimentalmente hablando. Porqué lo es que alguien como tú escriba para mi persona y que además me lo hayas regalado de esta forma y manera.
Las emociones no se pueden pesar...El valor del cariño que te tengo, la lealtad a tu persona y la admiración a tu obra no tiene fin...
Así llevo más de una década, desde una noche que tú describes muy bien en el poema y en la que antes que tú mismo sentí tu potencial y supe que llegarías al día de hoy con muchos éxitos en tu haber. Solo con proponerte dejar salir tu talento.
Ningún camino está desprovisto de trabas, dificultades y responsabilidades, pero tú tienes la fortaleza, ilusión y ganas para ir recorriéndolo sin prisas pero sin pausas.
Decirte cuanto te quiero es algo que ya sabes, pero aún me parece como el primero alma gemela y lo único cierto es que no será el último. Así que lo dicho...Te quiero.